El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha lanzado un fuerte llamado a la consolidación de la democracia en el país, luego de afirmar que su gobierno estuvo en serio riesgo de sufrir un golpe de estado, presuntamente planeado por su predecesor, el ultraderechista Jair Bolsonaro.
En un discurso pronunciado durante una reunión con su gabinete de ministros, Lula da Silva expresó su preocupación y consternación ante las revelaciones hechas por excomandantes de las Fuerzas Armadas, quienes que Bolsonaro les propuso sumarse a un plan para anular las elecciones de 2022, con el objetivo de mantenerse en el poder.
Las alarmantes afirmaciones surgieron a raíz de los testimonios divulgados la semana pasada por exjefes del Ejército y la Fuerza Aérea, quienes revelaron haberse reunido en varias ocasiones con Bolsonaro y sus asesores cercanos. Durante estas reuniones, se les habría invitado a apoyar un plan destinado a invalidar los resultados de las elecciones en las que Lula da Silva resultó ganador.
El actual presidente brasileño no dudó en calificar a Bolsonaro como un "cobarde" por su supuesta participación en estos planes antidemocráticos, acusándolo además de carecer del coraje necesario para llevar a cabo sus proyectos autoritarios. Lula señaló que Bolsonaro no actuó de inmediato, sino que esperó a que ocurriera un golpe de estado después de haber viajado a Estados Unidos.
Semana começando com muito trabalho. Um balanço desses um ano e três meses de governo. Novas políticas públicas criadas, outras tantas retomadas. A economia crescendo com geração de emprego e aumento da renda.
— Lula (@LulaOficial) March 18, 2024
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En su discurso, Lula da Silva destacó el papel del pueblo brasileño, al que calificó de "sabio y valiente", señalando que fue gracias a su determinación y compromiso con la democracia que se pudo evitar un peligroso quiebre institucional. El presidente resaltó que, a pesar de los intentos de desestabilización y división promovidos por el gobierno anterior, el pueblo brasileño se mantuvo firme en la defensa de sus derechos y libertades.
En contraste con la gestión de Bolsonaro, Lula da Silva se comprometió a impulsar un gobierno que promueva la inclusión, el diálogo y el respeto a la diversidad, alejado de los discursos de odio y las políticas polarizantes. El mandatario brasileño subrayó la importancia de trabajar en la reconstrucción de los lazos sociales y en la búsqueda de soluciones para los desafíos que enfrenta el país, haciendo hincapié en la necesidad de construir una sociedad más justa y equitativa para todos sus ciudadanos.
En este sentido, Lula da Silva reiteró su compromiso con la defensa de la democracia y el estado de derecho, afirmando que su gobierno estará siempre del lado del pueblo brasileño, luchando incansablemente por garantizar sus derechos y libertades fundamentales. Asimismo, hizo un llamado a la unidad nacional y a la participación activa de todos los sectores de la sociedad en la construcción de un futuro mejor para el país.
Las declaraciones de Lula da Silva sobre el presunto riesgo de golpe de estado en Brasil ponen de manifiesto la importancia de fortalecer las instituciones democráticas y defender los principios fundamentales de la democracia. Ante los desafíos y amenazas que enfrenta la democracia en la actualidad, es fundamental que los líderes políticos y la sociedad en su conjunto se unan en la defensa de los valores democráticos y en la lucha contra cualquier forma de autoritarismo o intolerancia.
